Demencia Anti-Social del Gobernador de Puerto Rico

Demencia Anti-Social de Fortuño y su gobierno Fascista.

Francisco J. Cartagena Méndez
Escritor y activista social

La juventud se está perdiendo, tanto en el trasiego y abuso de drogas. La deserción escolar campea por doquier, y el alcohol es dominante errante y consumidor de vidas, anhelos y metas. Es lo que escuchamos diariamente sobre la juventud en Puerto Rico, pero pocas veces se comenta como el gobierno contribuye a dichas reacciones adversas ante un sistema que poco promueve oportunidades a este sector que es macaneado y agredido sin piedad.

Resulta que existe un factor predominante que no es ni sedativo, ni hipnótico, (más bien abusivo) pero que provee un mecanismo de acción desfavorable en la absorción de oportunidades orientadas al rescate o promoción de valores y ofertas laborales a la juventud. Dicho factor empleado por el estado es metabolizado en el hígado de la desesperación de jóvenes con aspiraciones y sin recursos.

La biodisponibilidad de dichas aspiraciones se ve trastocada por un bajo porcentaje ante acciones como las ocurridas el pasado 30 de junio en el Capitolio, en donde cientos de jóvenes fueron víctimas de abuso policiaco. Macanazos, golpes, empujones, gas pimienta, gases lacrimógenos fueron las contraindicaciones de la justicia y de una manifestación pacífica en contra de hombres, mujeres y miembros de la prensa, a quienes la fuerza de choque agredió por igual y sin piedad.

La interacción de este abuso policiaco y aparentemente planificado de ante mano, afecta peligrosamente diversas esferas de la sociedad. Por un lado atenta en contra de los derechos constitucionales básicos, y por otro tiene un efecto emocional negativo en quienes son objeto de la opresión.
Como reacciones adversas el gobierno podría esperar un incremento en manifestaciones de la ciudadanía. Otra reacción adversa lo es el sufrimiento, el daño emocional y psicológico y la desesperanza de quienes fueron agredidos (as), por policías que no portaban en sus uniformes ni sus nombres ni sus placas.

La fomentación de la violencia en contra de la mujer que tantas vidas ha cobrado este año fue otra reacción adversa. En dicha manifestación se reflejó brutalidad y cobardía policiaca evidenciada por diversos visuales que denotaban todo tipo de agresiones en contra de mujeres. ¿Es esa la campaña del estado en contra de la violencia doméstica? Es inaceptable.

El mejor tratamiento ante las acciones neoliberales, fascistas y paramilitares que han ocurrido los últimos meses por parte del gobierno, nada tiene que ver con farmacología. Pero sí con la apertura por parte del estado al dialogo con toda organización y ciudadano, el cese de despidos de empleados públicos, la reapertura del museo de historia africana, y la protección del medio ambiente, la educación pública y la cultura.

Así como mejorar el sistema de rehabilitación en las cárceles, y el de la prevención de la violencia doméstica. Otorgar verdaderas oportunidades de crecimiento y de trabajo a la juventud y no oprimirla, y por último garantizar con la acción y no con palabras hipócritas, los derechos constitucionales.

Como recomendaciones se debería emplear medicamentos anti-psicóticos, ósea bloqueadores no selectivos de los receptores de dopamina (causante de la demencia) en el cerebro del gobernador Luis Fortuño, el Presidente del Senado Thomas Rivera Schatz y el Super Intendente de la Policía Figueroa Sancha, quienes han reflejado (demencias anti-sociales) y, (trastornos psicóticos anti-educación pública, anti-empleado público, la cultura, la igualdad de derechos de la comunidad homosexual y la democracia).

La juventud no toleraremos más que se nos siga llamando delincuentes, bandidos o terroristas. Si el gobernador no tiene capacidad para gobernar, la solución es simple, que renuncie. Basta ya de abusos en contra del pueblo. Comentarios a: eljimagua@live.com